Imagina una inhóspita isla a la mitad del Océano Atlántico, apenas abajo del Círculo Polar Ártico, plagada de volcanes activos y vulnerable a frecuentes terremotos. Es un lugar donde los inviernos son crudos, oscuros y gélidos, y los veranos templados y lluviosos. La mayor parte de la isla está cubierta por roca volcánica y glaciares, y sólo las zonas costeras tienen un suelo suficientemente fértil para albergar vegetación.
Vista del glaciar Eviafjalajokull desde Vestmannaeyjar, Islandia |
A esta isla llegaron hace casi once siglos y medio -en el 874 d.C- un grupo de vikingos noruegos en busca de nuevos territorios. Eventualmente, los vikingos continuarían su marcha hacia el oeste y llegarían a Groenlandia y después a Terranova en Canadá -5 siglos antes de que Cristóbal Colón llegara a las Antillas. Pero algunos campesinos y ganaderos vikingos se establecieron en Islandia, y para el año 940 d.C. eran tan numerosos que decidieron crear el primer parlamento del mundo -el Althingi- para poder crear reglas y acuerdos que les permitieran vivir mejor en sociedad. En el clima inhóspito de la isla, los pobladores tuvieron que talar árboles para conseguir madera para calentarse, y gradualmente fueron acabando con todos los bosques de la isla (hasta la fecha, Islandia prácticamente no tiene árboles). Al cabo de unos siglos, en la superficie de Islandia sólo quedaron rocas, pasto, volcanes y glaciares. En invierno prácticamente toda la isla se cubre de un manto blanco y apenas sobresalen algunas rocas.
Clásico paisaje cuasi-lunar en Vestmannaeyjar, Islandia |
Desde que se comenzó a poblar en el siglo IX, Islandia entró en un típico equilibrio malthusiano donde la población nunca podía crecer mucho porque la isla padecía frecuentes hambrunas ocasionadas tanto por las explosiones volcánicas (que destruían cultivos y mataban gente) como por los inviernos crudos, que podían matar a la mayor parte del ganado (principalmente ovejas, cabras y vacas). Quizá por no tener mucho que hacer los islandeses se sentaron a leer y a escribir: su tradición literaria de sagas -crónicas de viajes y aventuras- es una de las más ricas de la Europa medieval, y el islandés ha cambiado tan poco en más de mil años que los islandeses hoy pueden leer con facilidad lo que escribieron sus ancestros en los siglos X y XI.
Escultura (monumento) a los marineros vikingos, en Reykjavik |
Adelantemos el reloj hasta el siglo XXI. Islandia es una de las sociedades más civilizadas, prósperas, pacíficas y educadas que jamás hayan existido sobre la faz de la tierra. Los islandeses publican y leen más libros -en términos per cápita- que ningún otro país del mundo. También tienen la mayor cantidad de Grandes Maestros de ajedrez en relación a la población. A pesar de la terrible crisis en 2008-9 (que inició en Islandia por un colapso bancario de proporciones épicas) los 300 mil habitantes de esta isla gozan un nivel de vida envidiable y su ingreso per cápita es 4 veces mayor al de los mexicanos. Quién sabe cómo le hicieron los islandeses todos estos siglos, pero han sabido cómo construir una sociedad existosa.
Padre e hijo en el malecón norte de Reykjavik |
En Islandia el principal atractivo es la naturaleza: hay algo sobre los paisajes islándicos, tan remotos y desolados, tan crudos y serenos, que muchos viajeros encuentran absolutamente irresistible. Los géysers (fuentes termales que eruptan periódicamente, expulsando una columna de agua caliente y vapor en el aire) son otro atractivo fenomenal de este país: la palabra Geysir es islandesa, así se le llamó al y se refiere a un géyser que aún hace erupción de vez en cuando (su hermano menor, Strokkur, hace erupción en promedio cada 7 minutos).
Los enormes glaciares de Islandia -tiene más que el resto de Europa combinada- son otro atractivo, pero visitarlos requiere rentar un vehículo 4x4 o bien pagar una expedición... lo cual es extremadamente caro (más de 300 dólares por persona).
Un paseo más económico es la Blue Lagoon, un increíble complejo de aguas termales a 45 minutos de Reykjavik. El paquete de transporte desde Reykjavik y entrada al parque acuático cuesta alrededor de 60 dólares. En la Blue Lagoon te puedes bañar por el tiempo que quieras en lagunas sulfurosas, con agua a 40 grados centígrados, mientras tu piel se exfolia y rejuvenece por sí sola.
Géyser Strokkur, a 2 horas de Reykjavik. Un espectáculo 100% gratuito |
Los enormes glaciares de Islandia -tiene más que el resto de Europa combinada- son otro atractivo, pero visitarlos requiere rentar un vehículo 4x4 o bien pagar una expedición... lo cual es extremadamente caro (más de 300 dólares por persona).
Un paseo más económico es la Blue Lagoon, un increíble complejo de aguas termales a 45 minutos de Reykjavik. El paquete de transporte desde Reykjavik y entrada al parque acuático cuesta alrededor de 60 dólares. En la Blue Lagoon te puedes bañar por el tiempo que quieras en lagunas sulfurosas, con agua a 40 grados centígrados, mientras tu piel se exfolia y rejuvenece por sí sola.
Una vista de la Blue Lagoon en Keflavik, a 45 min de Reykjavik |
Pero en mi opinión lo mejor de Reykjavik son sus múltiples parques acuáticos en medio de la ciudad, que normalmente poseen una alberca y varios mega-jacuzzis al aire libre con el agua a distintas temperaturas. Estos sitios, llamados "hot pots", son excelentes para convivir con islandeses de ambos géneros y de todas las edades. Estar en un "hot pot" a 40 grados centígrados mientras la temperatura ambiente es de un grado bajo cero es una experiencia muy relajante. De hecho, cuando pasas más de 5 minutos inmerso en agua a esta temperatura, eres capaz de resistir temperaturas exteriores bajo cero. Los islandeses dicen que este ejercicio mejora la circulación y contribuye a su longevidad: dado que los islandeses viven en promedio hasta los 83 años, me inclino a pensar que tienen algo de razón.
Parque acuático Laugardalslaug, en Reykjavik |
Cómo llegar: Icelandair vuela a Reykjavik desde varias ciudades de Estados Unidos. Reykjavik está a 7 horas en avión de Nueva York. Un vuelo sencillo cuesta unos 350 dólares. Si vas a volar de Estados Unidos a Europa, checa los precios de volar con Icelandair vía Reykjavik y considera pasar unos días ahí, sin costo adicional.
Costos: Islandia, como los países escandinavos, es muy caro. Los hostales cuestan arriba de 350 pesos la noche (unos 30 dólares la noche). La otra alternativa es CouchSurfing, que es lo que yo hice cuando visité Islandia el año pasado. Es una gran forma de hospedarte gratis y conocer islandeses.
La comida es cara, pero hay supermercados donde podrás encontrar alimentos a precios decentes. Busca la cadena de supermercados Bonus, la más barata y con un rango bastante bueno de alimentos. En un restorán normal estarás pagando entre 15 y 20 dólares por un platillo principal y un refresco. Si te vas a quedar en un hostal y a comer en restoranes, necesitarás mínimo 90-100 dólares diarios. Trata de cocinarte o comprar comida en Bonus y estarás pagando 65-75 dólares diarios. Aplica couchsurging y podrás hacerla con 40 dólares diarios. Pero todas las atracciones (Blue Lagoon, visitas a los géysirs, Þingvellir, etc.) costarán mucho más.
Mi recomendación es que si vas a volar de Europa a Norteamérica (o viceversa) y Icelandair ofrece tarifas similares a otras aerolíneas en tu ruta, analices la posibilidad de hacer una "escala" en Islandia de 3 o 4 días para disfrutar un poco este hermoso y distinto país.
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