16 ago 2012

¡Adiós, Gran Bretaña!

Ahora sí, ¡al continente europeo! Se acabó la temporada de entrenamiento en tierras británicas. Mañana estaré en Francia, y comenzaré el largo viaje al este. Me cuesta trabajo creer, desde mi efímero refugio en la isla de Wight, que ya completé la vuelta a Gran Bretaña que me plantée hace unos meses. Empecé en el extremo suroeste de la isla, llegué hasta el extremo noreste, visité unas islas muy norteñas que ni siquiera sabía que existían (las Orkney) y luego regresé a la costa sur de Inglaterra a un paso más relajado. Fueron 55 días en total, 41 de pedalear y 14 de descansar, socializar y turistear. Mi confiabilísimo odómetro registra 3355 kilómetros, que es la distancia que separa a la Ciudad de México de Nueva York (en línea recta). Subí y bajé montañas, crucé campos y bosques, visité pueblos y ciudades, hice amigos -y visité a los que ya tenía- y me familiaricé con varios aspectos de la vida británica, desde la comida hasta la política, pasando por manejar del lado izquierdo de la calle, ver la BBC, ir al pub por una pint de un "local ale" y demás. Recordaré este país (o países, si contamos Inglaterra y Escocia separados) con cariño, porque realmente me trató muy bien, y tuve también la fortuna de estar aquí durante un evento tan especial como los juegos olímpicos.

Bosque, sombra, cero tráfico: ¿qué más se puede pedir?
Pero también me emociona la idea de pedalear en Francia, practicar mi francés (que lleva dos años archivado en algún lugar de mi cerebro... si es que aún está ahi) y explorar otra cultura y otros paisajes. Aún no tengo bien definida mi ruta (debo conseguir un buen mapa carretero de Francia) pero probablemente estaré en tierras galas hasta principios o mediados de septiembre (2 a 4 semanas). Lo que sí sé es que tanto yo como mi bici estamos bien. Hace un par de días, en Oxford, llevé a mi bici a una tienda-taller para que le realizaran un servicio de mantenimiento a fondo. Ajustaron y limpiaron cables y frenos, ajustaron también los rayos (spokes) de las llantas, y me dijeron que en general está en excelente estado la bicicleta así que puede aguantar muchos otros miles de kilómetros.

Las cifras del viaje

Distancias
  • 3355 kilómetros recorridos en bicicleta hasta el 16 de agosto de 2012
  • 82 kilómetros, el recorrido promedio por día (sin contar los días de descanso)
  • 127 km, el recorrido más largo (Helmsdale-Inverness, en el norte de Escocia
Velocidades
  • 17.6 kilómetros por hora (km/h), la velocidad promedio de desplazamiento
  • 22.3 km/h, la velocidad promedio diaria más alta (trayecto Durham-York)
  • 73.3 km/h, la velocidad máxima registrada (en las colinas Lammurmuir, entre Edimburgo y Berwick-upon-Tweed)
Tiempo
  • 4 horas 48 minutos, tiempo promedio pedaleando cada día (excluyendo descansos y tiempo inactivo)
  • 7 horas 13 minutos, el día más largo (Helmsdale-Inverness)
Noches
  • 39 lugares distintos donde he pasado la noche
  • 29 noches en hostal, 9 en B&B, 8 acampando, 6 en hotel, 3 en casa de amigos
  • 30 noches en Inglaterra, 24 en Escocia y 1 en Gales (Chepstow)   
  • 4 noches, el máximo en un mismo sitio (Albatross Hostel, en Newcastle-upon-Tyne, Inglaterra)
Bicicleta
  • 1 caída de la bicicleta (en Edimburgo, por la lluvia y las condiciones de la ciclovía -sin consecuencias graves)
  • 1 sustitución de llanta en Ballater, en las Highlands escocesas (la llanta se había roto en el borde, por causas desconocidas)
  • 2 ponchaduras, ambas ocurridas cerca de Corgaff en las Highlands escocesas
  • Ningún otro cambio o reemplazo de componente requerido hasta el momento, ni siquiera brake pads!
Hostales, mi tipo de alojamiento predilecto. En la foto, el dormitorio
del excelente YHA Sherwood Forest, en Edwinstowe, Nottinghamshire

Los 5 mejores momentos en la bicicleta 

1. Llegar a John O Groats y con ello culminar el recorrido de 1711 km de punta a punta de Gran Bretaña. Los ciclistas experimentados hacen este recorrido en mucho menos tiempo que yo, pero para mí lo importante no era cuántos días necesitaba para llegar sino constatar que podía hacerlo, a mi ritmo. Esta ruta, la más larga y legendaria en las islas británicas, era para mí un sueño distante, que poco a poco se fue haciendo realidad.
2. Conquistar los puertos de montaña de Lecht Pass y Glen Shee, en las montañas Grampians en The Cairngorms National Park, en Escocia. Fue, físicamente, lo más difícil, pero las vistas desde la cima, y los dos descensos vertiginosos, más que compensaron el esfuerzo.
3. Mi primer centenario -es decir, mi primer recorrido de más de 100 kilómetros- entre Zeal Monachorum y Glastonbury, en el sur de Inglaterra (día 5 del viaje). Desde ese día, comencé a tener más confianza en mis dos piernas y su capacidad para impulsarme grandes distancias a través de la bicicleta.
4. Cruzar, junto con mi amigo Henning, la frontera entre Inglaterra y Escocia, y unos minutos después alcanzar la marca de los 1000 kilómetros recorridos. Fueron dos hitos prácticamente simultáneos que disfruté mucho.
5. Llegar a Perth, Escocia, luego de un día fatídico: no paró de llover, sufrí una caída bastante fea de la bicicleta (saliendo de Edimburgo) y consideré seriamente dejar de pedalear por el resto del día. Alcanzar tu meta del día, a pesar de la adversidad, es siempre un motivo de gran satisfacción.

Llegar a los 3000 km también fue un gran momento, pero creo
que ya no entra en el top 5

Los 5 peores momentos en la bicicleta

1. Las múltiples veces que tuve que empujar mi bici colina arriba el primer día, en Cornwall. Mis piernas, simplemente, no tenían fuerza, se agotaban muy rápidamente. Ese día consideré seriamente la viabilidad de todo el proyecto, y recordé un fragmento de un libro de ciclismo que alertaba sobre la falta de preparación: "la mayoría de quienes emprenden un largo viaje en bicicleta sin haberse preparado, se rinden antes de cumplir la tercera semana". Afortunadamente, las cosas mejoraron rápidamente luego de ese primer día, pero de que fue difícil, lo fue.
2. La caída de la bicicleta en Edimburgo, en una ciclovía angosta y adyacente a un desnivel cubierto por vegetación. Ese día todo estaba empapado, tenía frío en mis pies porque el agua había llegado hasta los calcetines (más tarde compré calcetines a prueba de agua y cubiertas para los zapatos, de modo que no he vuelto a tener ese problema). La caída fue la gota que derramó el vaso, la frustración fue grande pero seguí adelante.
3. Pedalear contra el viento en el lejano norte de Escocia, entre Lairg y Altnaharra (día 19). Mi libro-guía advertía sobre esta situación: "reza para que el viento sople desde el sur". No, en mi caso el viento venía del norte. Mi velocidad de crucero, que normalmente es de 22-25 km/h, era de apenas 13-14 km/h. Cuando enfrentas una colina, tienes que emplearte a fondo pero sabes que esa ganancia de altitud eventualmente se transformará en un descenso glorioso. Pero cuando enfrentas al viento, sabes que no hay recompensa: la naturaleza, sencillamente, te obliga a pagar un precio mucho mayor para recorrer la misma distancia.
4. Ser asediado por los mosquitos (midges) en Escocia. Los fatídicos midges son una plaga durante el verano en Escocia. Te persiguen aún a velocidades de 15 km/h. Eso significa que no te puedes detener, no puedes bajar la velocidad. Y por lo tanto, a la primera colina... te comienzan a comer vivo. La solución es llevar un buen repelente; el que yo llevaba no servía, los midges se morían de la risa de él. 
5. Tener que circular en carreteras muy transitadas, y soportar el paso frecuente de camiones y vehículos pesados. En zonas densamente pobladas (y las hay muchas en GB) es inevitable, de vez en cuando, el pedalear en "A roads", es decir carreteras principales. No es agradable, particularmente cuando no hay acotamiento.

La ruta completa (del 23 de junio al 17 de agosto):
Penzance - Land's End - Camborne - Bodmin - Zeal Monachorum, Devon - Glastonbury - Chepstow (Gales) - Worcester - Telford - Northwich - Lancaster - Appleby - Penrith - Hawick (Escocia) - Edimburgo (1) - Perth - Braemar - Grantown-on-Spey - Inverness (1) - Lairg - Bettyhill - John O Groates - South Ronaldsay, Orkney - Kirkwall, Orkney - Stromness, Orkney - Scrabster - Helmsdale - Inverness (2) - Gairlochy - Crianlarich - Linlithgow - Edimburgo (2) - Berwick-upon-Tweed (Inglaterra) - Alnwick - Newcastle-upon-Tyne - Durham - York - Edwinstowe - Moira (National Forest) - Coventry - Oxford - Southampton - Rookley, Isle of Wight - Portsmouth

Próximo destino: Cherbourg, Francia! Tengo reservadas 2 noches en el YHA local. No sé a dónde iré después, pero seguramente hacia el sureste.








1 comentario:

  1. Thanks Daniel! Wish I'd known about Rosegrove B&B when I was cycling in the Grampians! Looks like a fantastic place. Regards,

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